- ¿Qué es para vosotros B & Paul?

Pablo y Bea:

Es una apuesta para creer en el arte más allá de los mercantilismos, en nuestro estudio producimos nuestros propios espacios. Hacemos un trabajo de investigación, donde se concibe un estudio de arquitectura que se convierte en una galería de arte.

Somos un matrimonio cuyo arte no entiende de egos sino que todo es resultado del trabajo en equipo.

- ¿Qué aportáis cada uno?

Pablo: 

Ella es brillante gráficamente y en términos de composición, yo me decanto más por las esculturas.

- ¿Cómo trabajáis?

Pablo:

Trabajamos con la forma y la masa tratando de activar espacios. Para eso, uso la composición y elementos hasta que mi espacio está activo y consigo transmitir una sensación de paz.

- ¿Habéis hecho alguna colaboración en moda?

Pablo y Bea:

Hicimos un proyecto Slow Fashion con una diseñadora de vestidos de novia. Generamos estampados inspirados en una idea para que las novias puedan personalizar una parte de su vestido.

- ¿Cuál es vuestra propuesta?

Pablo:

Se basa en ver menos y preguntar más qué es. Por eso hacemos juegos de perspectiva.

Hay que pararse y mirar, en el fondo nuestra obra es una repetición de trazos para mirar, repetir, volver a mirar, simplemente ver, simplemente observarte a ti mismo.

- ¿Quién son tus referentes?

Pablo:

Jorge Oteiza y Henry Moore. Persiguen la activación de los espacios y hablan de la teoría de la estética.

- ¿Cuánto tardas en acabar una obra?

Pablo:

Igual la pregunta es: ¿cuándo crees que está lista para que alguien se la lleve? el tiempo varía muchísimo según la pieza.

- ¿Para ti, el arte es moda?

Pablo:

En mi opinión, el arte tiene más que ver con el transmitir, aunque ahora está muy de moda el transmitir algo por ejemplo, la sostenibilidad o la ideología de género. También hay mucha gente que estudia cosas muy innovadoras y no se deja llevar por ninguna moda.