Empezamos año nuevo al 2010. El 6 de octubre de ese año nacía Instagram, y con esta red social llegó el boom de las recomendaciones y venta de productos a través de redes sociales de forma masiva. Movidos por las ganas de compartir, los usuarios se combinaron contando experiencias positivas al haber utilizado personalmente diferentes productos, convirtiéndose pronto en una forma de ganar dinero. Ya sea un extra que complemente otras actividades económicas o bien se adopte como forma de vida, el hacer dinero amortizando los perfiles sociales que poseemos se ha convertido en una práctica común.
Y no es raro que cada vez se sume más gente. La precariedad laboral, la difícil conciliación entre trabajo y familia, los bajos salarios y las pocas posibilidades de crecimiento profesional en ciertos sectores, son las principales razones. El “ venta social ” se convierte en una solución comparable para cualquier persona, cobrando por recomendar desde el corazón, algo que harías gratuitamente de todas las formas.
Una de las categorías de producto susceptible de recomendarse en redes sociales son los productos de cosmética, destacando especialmente los blanqueadores dentales. Tal importancia ha tenido esta tendencia que el canal de televisión americano KPRC hizo un reportaje al respecto.
En este reportaje quisieron analizar los efectos de tres productos que se promocionan en redes sociales y que prometen un blanqueamiento de manera natural tras la utilización de los mismos. La conclusión a la que llegaron es que a pesar de tener amplia difusión social e incluso estar avalados por “ influencers ”, tan sólo uno de los tres productos cumple las expectativas que prometen.
De los tres productos, la pasta de dientes AP- 24 es la única que tiene fluorudo, un ingrediente que los dentistas recomiendan utilizar en cualquier artículo de cuidado bucal. Lo mejor de este producto blanqueante es el hecho de que no tiene peróxido, componente de blanqueamientos profesionales que aunque aclara, daña el esmalte produciendo sensibilidad dental y debilitando los tejidos bucales blandos. Por el contrario, la pasta AP-24 está compuesta por ingredientes naturales que reducen las manchas sin desgastar el esmalte, ofreciendo el 63 % de aumento de brillo y un mayor blanqueamiento sin abrasión. como es el caso de la competencia.
A pesar del testimonio independiente que apoyaron en el programa no hemos podido evitarlo, y hemos decidido probarlo nosotras directamente, para poder daros nuestra opinión de primera mano. Al utilizarla nos hemos dado cuenta de que no blanquea los dientes, en el sentido que no aclara el color de nuestro propio esmalte, sino que elimina las manchas que tenemos por diferentes hábitos como fumar, tomar café/té etc. En función de la mancha que tenga cada persona, los dientes se aclaran más o menos. Aquí os dejamos unas fotos para que veais la diferencia y como podáis imaginaros ¡hemos quedado encantadas con el resultado!
Investigando un poco más acerca del producto nos topamos con un video del científico que la desarrolló, Dr. Joe Chang, en el que se explica más en profundidad sus propiedades y beneficios. Su éxito ha llegado a tal nivel internacional que la revista Elle Dinamarca la ha destacado como uno de los mejores tratamientos dentales de todos los tiempos; es una de las que más se vende a nivel mundial a través de redes sociales, y en el 2017 ganó el “Pure Beauty Award 2017” por su fuerte recomendación en redes, en la categoría del mejor producto de belleza oral.