Introducción. Háblanos un poco de ti. ¿Cómo te metiste en el mundo de la moda?
Me llamo Clea Fitz-James Stuart, he estado relacionada con el mundo de la moda desde siempre. Lo que pasa es que al ser una carrera menor, mis padres me recomendaron que estudiara Psicología, y eso hice. Pero a mitad de carrera me di cuenta que mi sueño era la moda y opté entonces por lo que realmente me apetecía.
¿Cuándo empezó tu trabajo como diseñadora?
Empecé con Hoss Intropia. Fueron mis primeros años en el sector. Allí es donde me enamoré totalmente del punto. Luego trabajé con Duyos para Don Algodón, con Zara y con Elena Benarroch. Todas fueron experiencias maravillosas que me enseñaron diferentes lados del sector.
En cuanto a inspiración, qué te inspira, cómo surgen tus colecciones.
Me inspira prácticamente todo. Me encanta el arte por ejemplo, intento ir a dos exposiciones o más por semana. Los viajes es otro foco importante de inspiración. Los conciertos, la música en directo, la arquitectura, la decoración. El brutalismo es por ejemplo una de mis nuevas obsesiones.
Háblanos de tus colecciones, de las prendas.
Está todo hecho en España porque creo que es importante volver a las raíces. Tenemos unas fábricas de punto excepcionales que a la gente le dan miedo por los precios. Pero a mí me gusta apostar precisamente por eso. Por nuestros artesanos, por el buen saber hacer. Los fabricantes son personas jóvenes pero que han visto a sus padres trabajar toda la vida en la industria del punto. Entonces saben Latín. Además la calidad es asombrosa, nada que ver con China o India.
¿Qué significa para ti la etiqueta Made in Spain?
Artesanía. Me parece incluso romántico volver a tu país para construir una colección. No sé, también calidad, facilidad, atención.
Con una visión tan internacional como la tuya. ¿Crees que fuera de nuestro país se valora la etiqueta Made in Spain?
Sí, fuera de España se valora muchísimo. Y en España, creo que también se valora. Pero es cierto que estamos acostumbrados en general al low cost. Nos han invadido. Pero ya empezamos a comprender la calidad de las prendas Slow.
¿Confías es el SLOW FASHION? ¿Eres partidaria del movimiento de moda lenta?
Sí, por supuesto. Creo que es una tendencia que deberíamos adquirir todos. Frenar el ritmo que nos han inculcado las grandes empresas. Además a nivel medioambiental, creo que es necesario. Para nosotros y para el planeta.
¿Lo mejor de tu profesión? ¿Lo peor de tu profesión?
Diseñar. El proceso completo. Me encanta ver como de un ovillo, consigo un vestido de punto perfecto. Es una maravilla de principio a fin. Y lo peor, los números, sin duda, ¡Los llevo fatal!
Un sueño que tengas para tu trabajo.
Un sueño para Clea Stuart sería internacionalizarme. Me encantaría ir a Londres, a París, Copenhague, Tokio, creo que la colección se vendería muy bien allí.