La importancia de un buen bálsamo labial

La importancia de un buen bálsamo labial

A lo largo de su vida, una persona puede llegar a ingerir hasta 2 barras de labios o bálsamos por el mero acto reflejo de chuparlos cuando se ha aplicado este producto. Por esta razón, la elección del labial correcto tiene una especial importancia.

Los bálsamos labiales son iguales de importantes que una buena crema de cara. Estos protegen, nutren y reparan la piel de los labios, una de las más sensibles en nuestro cuerpo ya que no posee ni glándulas sebáceas ni apenas melanina que los mantengan protegidos. No te confíes, tanto las inclemencias de un clima frío, como la dureza de un clima seco y soleado pueden que nuestros labios se resequen o resquebrajen, por lo que estamos hablando de un producto que debes usar todo el año.


Neutros y naturales, con fotoprotector y en barra

A día de hoy, el mercado ofrece un sinfín de opciones que giran en torno a las siguientes variables: packaging o formato e ingredientes.

Empecemos por los ingredientes. Los bálsamos están elaborados principalmente de ceras enriquecidas con otros componentes como la cera de abeja, lanolina, manteca de karité, vitaminas, aceite de almendras, caléndula, aloe vera o el ácido hialurónico. Todos estos ingredientes aportan a tu bálsamo componentes buenos que ayudan a mantener la hidratación y lucir unos labios bonitos. Sin embargo, el resto de ingredientes como colorantes, aromas o perfumes son añadidos necesarios que encarecen el producto y no aportan nada sustancial. En ocasiones, es pura estrategia de marketing que no nos beneficia de todos modos.

Por ejemplo, cuando elegimos bálsamos labiales con sabores o fragancias tendemos a chuparlos o masajearlos con mayor frecuencia. Es algo de lo que no somos conscientes y, sin embargo, no podemos evitar. La acción recurrente de la saliva favorece la deshidratación, con lo que entra en un círculo vicioso en el que gastas producto sin sentido.

En cuanto al color somos más flexibles y puede tener sentido que quieras un bálsamo con color si quieres utilizarlo como parte de tu maquillaje. Ten en cuenta que, si tiene color, tendrás que ser muy precisa a la hora de aplicarlo, nada de salirte de la comisura. Estos productos están muy bien cuando tus labios están hidratados y quieres mantener esa hidratación a la vez que dar un toque de color. Pero, si lo que quieres es reparar unos labios ya agrietados, opta siempre por una fórmula con color neutro o transparente.

Un componente indispensable de este tipo de productos es, sin lugar a duda, el fotoprotector. Si lleváis un tiempo por aquí, esto no puede sorprenderos… ¡Fans de utilizar fotoprotector! Tu piel y tu salud te lo agradecerán siempre. Y grabad, tanto en invierno como en verano. La piel de los labios no tiene casi melanina por lo que está muy desprotegida frente a los rayos solares.

Por último, en cuanto al formato sí que reina la regla de “sobre gustos no hay nada escrito”. Las marcas han desarrollado este producto en barra de labios, bálsamos cremosos en tarrina, geles de tubo, etc. Nosotras preferimos el formato de barra por comodidad, pero en este apartado sois totalmente libres de elegir lo que más os convenga.

Por todo lo anterior, nosotras lo tenemos claro: el Sunright® Lipbalm rico en emolientes y humectantes que mantiene la piel hidratada y con vitamina E, que brinda un alivio antioxidante ante el sol, viento y frío es la elección ideal. En un cómodo formato de barra te aporta la hidratación y protección solar de amplio espectro que necesitas.

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